Los síntomas principales de la miopía son la dificultad para ver objetos distantes, que puede manifestarse como imágenes borrosas o la necesidad de entrecerrar los ojos para mejorar el enfoque. Las personas con miopía a menudo se quejan de dolores de cabeza y fatiga visual, especialmente después de leer o trabajar en la computadora durante mucho tiempo. En los niños, la miopía puede manifestarse como problemas para estudiar y hacer los deberes.
La miopía la diagnostica un oftalmólogo mediante varios métodos. El método más sencillo y común es comprobar la agudeza visual utilizando la mesa de Sivtsev. El médico también puede utilizar la refractometría, que puede determinar con precisión el grado de error refractivo. Es importante realizarse controles periódicos con un oftalmólogo, especialmente si hay antecedentes familiares de miopía.
Existen varios métodos para corregir la miopía, los más comunes son las gafas y las lentes de contacto. Las gafas con lentes negativas compensan el error de refracción devolviendo el foco de la imagen a la retina. Las lentes de contacto pueden ser más convenientes para un estilo de vida activo, pero requieren higiene y cuidados estrictos.
En los últimos años, los métodos quirúrgicos para corregir la miopía, como la corrección de la visión con láser (LASIK), han ido ganando popularidad. Este procedimiento implica remodelar la córnea utilizando un láser para ajustar el foco de luz en la retina. Otro método moderno es la ortoqueratología, que utiliza lentes nocturnos especiales que cambian temporalmente la forma de la córnea y proporcionan una visión clara durante el día.
La prevención de la miopía en los niños es importante dada la creciente prevalencia de este trastorno visual. Uno de los factores clave para la prevención es pasar suficiente tiempo al aire libre. Las investigaciones muestran que los niños que pasan más tiempo al aire libre tienen menos probabilidades de sufrir miopía. Esto se debe a que la luz natural y la capacidad de enfocar objetos distantes promueven el desarrollo saludable de los ojos.
Otro aspecto importante de la prevención es organizar el régimen correcto de trabajo y descanso de los ojos. Los niños deben tomar descansos regulares mientras hacen los deberes y trabajan en la computadora. Una iluminación óptima del lugar de trabajo y una postura correcta también desempeñan un papel importante. Los padres deben controlar el tiempo que los niños pasan frente a la pantalla y fomentar el juego activo y las actividades al aire libre.
Andre PinedaEn las últimas décadas, los dispositivos digitales se han convertido en una parte integral de nuestras vidas, lo que ha provocado un aumento del tiempo que pasamos frente a las pantallas. Esto es especialmente cierto para los niños y adolescentes que utilizan activamente ordenadores, tabletas y teléfonos inteligentes para estudiar y entretenerse. El uso prolongado de estos dispositivos a corta distancia puede contribuir al desarrollo y progresión de la miopía.
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